sábado, 11 de septiembre de 2010

Clínica del Dr. Neuspiller

Sebastián Neuspiller fue emblema de Fénix, con su capacidad goleadora conquistó y llamó la atención de todos los aficionados del ascenso. Sin embargo, además de estar familiarizado con la estocada final del balón hacia la red, también se destaca como ginecólogo: a la mañana trabaja en la guardia del hospital Durand y por la tarde en Fecunditas, la clínica de reproducción de su padre, Nicolás Neuspiller.

Después de convertir un tanto para Los Cuervos, Neuspiller llegó a recibir el abrazo de Matías Almeyda y de El Beto Acosta, entre otros; aunque sus gritos también retumban en la sala de partos, cuando nace un bebé lo disfruta con sus pacientes. Es un tipo cálido, que aguarda su momento para entrar en acción.

El Dandi es seductor por naturaleza, dentro y fuera de la cancha. En el hospital más de una mujer, sobre todo las mayores y algunas no tanto, se tiran lances y lo llenan de piropos. En tanto, en el consultorio se encarga de extraer células madre del cordón umbilical para que, a través de un informe, los padres del bebé puedan detectar y prevenir futuras enfermedades. En el banco, no de suplentes, sino de esperma congela los anhelos de muchas mujeres, que por intemedio de la fecundación artificial o in vitro buscan dar a luz. Pero lo que más lo seduce al delantero de Fénix es la idea de que algún día pueda convertirse en ministro de salud.

En abril de 2010, Sebastián Neuspiller se retiró de su viejo amor: Fénix. Un club que le dio la oportunidad de establecer su condición de deportista, de quedar en la historia como uno de los máximos artilleros del fútbol argentino y de obtener el ascenso a la Primera C. En la actualidad, Neuspiller traslada su cualidad goleadora al campo de la medicina; la ginecología es una profesión en la que la se requiere de una asistencia esencial.

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